Perdido en el tiempo. No hay pasado ni hay futuro y ahora, ahora sólo hay un hilo con final fatal. Quisiera tener cosas bonitas que contarte, pero la verdad es que dejé de sentir. Cuando estás harto de la misma historia y te preguntas por qué siempre se repite ya no te afecta. Nacimos para aprender de los errores, lecciones a base de experiencia. Entonces amigo, no es culpa nuestra. Dedícate a ti mismo y no esperes nada. Desgraciadamente, es cuando viene todo. Si me devuelves las ganas podemos negociar.
Hubo un tiempo en el que
creía que podía con todo. Apropiación del lugar, terrenos infinitos,
salvajemente virgen. Conociendo la cuerda floja hasta el extremo, ya puedo
saber donde me voy a caer. Sólo me falta poder volar. Se que se acerca el
momento. No habría preocupaciones si no insistiera el desgarro de los días, las
zarpas de los minutos que no volverán. Tropezarse no está permitido más, la
verdad que no, ya me cansé. Luego hay que sacar fuerza muscular para subir la
escalada y yo ya estoy perezosa a estas alturas.
Góticos vacíos con
precipicio hacia el infierno. Que no te engañen, es sólo la cárcel o el frío en
oscuridad. Soledad en silencio de la mente. La guarida del dragón que incendia
tus decisiones, guardián de tus sueños, a los que llegas con derrotas. No se en
qué época de la vida estoy, al fin y al cabo es lineal y no hay diferencias.
Tampoco se la era de la Tierra, también parecen iguales y un pestañeo.
Uy, he empezado a volar, no
te has dado cuenta, sobre los segundos que dura un beso, sobre todos los
problemas que puse a calentar al fuego, olvidé de apagar y ahora son incendio.
Floto, me suspendo en aquel
lugar secreto donde no existe el tiempo. El hilo se ha roto.